esde el desk research inicial logramos enmarcar el modo en que se estructura el sistema educativo y vemos que su finalidad, en última instancia, se basa en la lógica del mercado laboral. Asumimos que la educación es como es porque se adecúa al funcionamiento de nuestra sociedad, siguiendo sus ritmos e impartiendo contenidos útiles para poder desempeñarnos a día de mañana dentro de los razonamientos de la economía de mercado. Sin embargo, hemos visto claramente que hay un choque entre la vida y las exigencias de un sistema educativo al que no acabamos de adaptarnos, existe un fallo en el modo actual de concebir la educación con consecuencias sociales y psicológicas a corto y largo plazo, moldeando a las personas de manera homogénea, entendiendo nuestra existencia de manera superficial como ciudadanos con un fin ya marcado y predeterminado, y basándose en unas lógicas desfasadas que poco tienen que ver con el mundo actual.






























El sistema educativo se diseñó en el siglo XIX, en plena Era Industrial, con el objetivo de convertir a los campesinos analfabetos en empleados que pudieran trabajar en las cadenas de montaje de las fábricas. Y lo cierto es que no ha cambiado mucho desde entonces. Esta es la razón por la que al ir a la escuela nos insisten en que «estudiemos mucho», que «busquemos salidas profesionales» y que «obtengamos un título universitario», creyendo que así encontraremos un «empleo fijo» con un «salario seguro y estable».
Pero dado que la realidad laboral ha cambiado, estas consignas académicas han dejado de ser válidas. Debido al imparable proceso de globalización, así como a las nuevas tecnologías, estamos presenciando el amanecer de la Era del Conocimiento, la cual cuenta con sus propias reglas de juego. Estamos educando a las nuevas generaciones para que afronten un mundo que ya no existe. No es casualidad que los jóvenes se sientan tan perdidos y desmotivados.



Borja Vilaseca (la Akademia 2015)
ENTREVISTA
Desde este punto de vista, queremos dar con perfiles que alienten a pensar al margen del sistema tradicional. Damos con Borja Vilaseca (Barcelona, 1981), un docente de la universidad de Barcelona y experto en desarrollo personal, con el que pretendemos hablar de forma distendida sobre el tema.

Nuestra idea de entrevista tiene como finalidad establecer una conversación entre Borja, un profesional dentro del campo de la educación emocional y un perfil joven (Jaume) y millenial como nosotros, que contrastará con sus respuestas la “visión experta” de Vilaseca.

Como jóvenes nacidos y crecidos con un móvil en la mano, el auge de Internet y las tecnologías, hemos encontrado en los memes y vídeos de Internet, (que mezclan y reciclan datos e imágenes encontrados en la web) una forma de expresión menos verbal y "menos cercana" dirían algunos, pero que nos atrevemos a decir que es efectiva, real y que nos permite expresarnos con facilidad, salir de nuestra subjetividad y darnos la oportunidad de conocer y aprender del otro.
¿Qué modelo de relación ideal te imaginas de docente-alumno ? (A nivel de jerarquía, lenguaje, dinámica…)

Una relación donde el docente sea como una herramienta en un mismo nivel jerárquico, con dinámicas de aprendizaje que permitan la experimentación, el autoconocimiento y un aprendizaje guiado por el interés del alumno. Con respecto al lenguaje, creo que apostaría por un lenguaje corporal que invite a la confianza y a nivel verbal un lenguaje estándar, de tú a tú.
Hemos observado en varias entrevistas y charlas que sueles usar el término educación industrial.

¿Nos podrías aclarar tu uso del término?
Me refiero a la educación estándar europea de la última década que se caracteriza por una homogeneización, una cultura del memorizar y vomitar, y un nulo desarrollo de la psicología de la persona, en definitiva, un sistema que no se preocupa por potenciar el autoconocimiento y con un fin marcado por el mercado laboral.
Para ti, qué es lo que hay tras la pregunta ¿quién eres, qué haces aquí, o cuál es tu talento?
Cuando hablamos de quién eres tú, hablamos de entrar en la búsqueda para encontrar tu propósito. Cuando realmente tu vida no tiene sentido y estás bastante perdido, entras en bucles de auto destrucción, te vuelves un inconsciente poniendo tu propia vida en juego. Lo que tiene mérito es el viaje de autoconocimiento, de introspección y desarrollo para convertirte en lo que siempre has sido.
En el año 2000, en plena crisis de la adolescencia, toqué fondo y empecé una búsqueda para encontrar mi propósito: el de ayudar a la gente a través del autoconocimiento. Como digo siempre, para que la gente se haga este tipo de preguntas, hay que facilitar el conocimiento para emprender un viaje dentro de uno mismo. Yo soy un empresario que quiere revolucionar el sistema educativo y ya he montado distintos programas pedagógicos como la Akademia. Uno de mis últimos proyectos es Kuestiona, una comunidad educativa para buscadores inconformistas que lanzaremos en julio. Llevo 15 años en este camino, estoy casado con una mujer maravillosa y tenemos dos hijos que son ninjas, samuráis y maestros que cada día me enseñan a soltar el ego.
En una entrevista tuya relativamente reciente entorno al desarrollo personal dentro de de los entornos familiares, nos tocó de forma especial una de tus afirmaciones en la que decías que "estamos viviendo en una cultura del victimismo", y reflexionando sobre ello, nos hicimos una pregunta que quisiéramos trasladarte ahora: ¿Crees que se está haciendo más énfasis en la salud mental que en la inteligencia emocional?
En esta era de la sobreinformación y las nuevas tecnologías, hemos de poder afrontar los retos políticos, sociales y medioambientales adquiriendo otro tipo de mentalidad más activa y crítica. Tenemos que empezar a entender la educación, no como un proceso de transmisión de información, instrucción y cambio de conductas, sino más bien como una herramienta “orientada a facilitar el desarrollo de la personalidad del ser humano” (CONDORI, Porfidio. Enseñanza y sesarrollo personal. 2016)
No es un asunto fácil el poder cambiar de la noche a la mañana la escuela tradicional y sus programas pedagógicos, pero creemos que el cambio ha de venir desde dentro, cambiando la mentalidad de docentes y alumnos, creando desde la propia educación, las artes, la filosofía, las ciencias o la literatura contenidos que fomenten el conocimiento pleno y consciente, que evidencien los mecanismos del sistema para poder ser agentes activos y conscientes dentro de éste, y que nos permitan crear y transmitir conocimiento nuevo y actualizado.
D
Borja
Jaume
Borja
¿Quién eres tú?
Borja
Borja
Jaume
Jaume
Jaume
Sí que ponemos más énfasis en la salud mental que antes, sin embargo, sigue siendo un taboo que dejamos de lado. Allá por 2008, una parte de la sociedad empezó a tratar en público lo que conocemos hoy como salud mental pero con estigmas, hoy, desgraciadamente, sigue pasando lo mismo, todavía queda un grandísimo camino por recorrer, porque el status quo que sigue haciéndonos creer que lo importante está fuera. Y es cierto que cada vez oímos hablar más de bienestar emocional, pero sin recursos que ayuden a solventar la gestión de las emociones.
¿Podrías extenderte un poco más Borja?
Borja
Sí, hablamos de una situación donde enfocamos la salud mental como algo elemental en el ser humano, lo celebramos, pero no avanzamos a este despertar de la persona. El apoyo emocional y conciencia sobre este fenómeno existe, sin embargo no ponemos en práctica los mecanismos para poder superar estos problemas. Hablamos de superación, de lo duro que es como individuo vivir con este tipo de problemas, pero no pasamos de ahí, no hay un viaje introspectivo ni búsqueda por una solución, hay un énfasis en el problema que es el victimismo del que hablaba antes.
¿Crees que con la crisis del COVID ha aumentado el nº de personas que sientan o recobren la necesidad de conocerse a sí mismos?
Borja
Totalmente, creo que ante esta crisis y el pasado confinamiento, cada uno ha afrontado esta situación de diferentes maneras y como ha podido, pero es verdad que hemos visto y he tenido la oportunidad de hablar con personas que han afrontado esta situación de incertidumbre como una oportunidad de aprendizaje.
Seguramente estas personas habrán pasado por una profunda crisis existencial, seguramente habrán sufrido alguna pérdida, se han quedado sin trabajo, o sino, ven que eso puede pasar. Pero estas personas observan y se preguntan: qué puedo aprender de ello, cómo puedo crecer, qué me puedo cuestionar.., están buscando fuentes alternativas de información, consumiendo conocimiento, formándose, invirtiendo en sí mismas, están intentando mantener la cordura, la sensatez y tratando de vivir el momento como una oportunidad para aprender y reinventarse. Este tipo de personas son las que más fortalecidas han salido de la crisis, porque ante este nuevo escenario macroeconómico que ha dejado la pandemia, ellas han estado orientando su vida al cambio, al aprendizaje y la transformación.
Dices que debemos prestar atención a nuestros sentimientos y aceptarlos para aprender de ellos, pero teniendo en cuenta que vivimos en una sociedad donde estamos más expuestos que nunca a los estímulos, ¿en qué medida crees que deberíamos prestar atención a tal cantidad de información sensorial y los sentimientos que nos causan, y que en muchas ocasiones nos desbordan?
Jaume
Es verdad que vivimos en una época sobrecargada de información, y es muy fácil que la gente, y más las nuevas generaciones como vosotros, se sientan en cierto modo perdidas y llenas de emociones que normalmente vienen causadas por un sentimiento de angustia e incomprensión. Yo siempre digo que es bueno abrazar y dejar fluir todos y cada uno de nuestros sentimientos, sean buenos o malos, pero el problema está en que normalmente no sabemos a qué se deben tales sensaciones, sentimos miedo, ira, tristeza y alegría, muchas veces a la vez, y en cortos periodos de tiempo, sentimos de todo en todas partes, es una corriente de estímulos que no nos deja pensar, o más bien, que no nos permite dejar de pensar sin ser verdaderamente conscientes de los que nos ha provocado tal o cual sentimiento.
Yendo al quid de la cuestión, creo que justamente, por estar rodeados de tal cantidad de información deberíamos prestar más atención que nunca a nuestros sentimientos, pensar más con el corazón que con la cabeza y hacer el esfuerzo de preguntarnos a nosotros mismos por qué sentimos lo que sentimos y de cuestionarnos todo lo que sucede en nuestro día a día.


Jaume
Borja
Borja
Para la formalización de la entrevista y por razones de poca disponibilidad de nuestros potenciales perfiles de entrevistados, al final optamos por recrear nosotros mismos la reunión con el entrevistadx por medio de la simulación. Así, lo que iba a ser una entrevista performativa cara a cara, se transformó en una especie de combersación online tipo whatsapp y que se adecuaba bien a nuestra tipología de inicio. Para hacer las respuestas de Borja, vimos y leímos varias entrevistas, charlas y monólogos suyos, luego hicimos un ejercicio de síntesis y selección, y finalmente redactamos en torno a ello y lo visto durante y anteriormente mediante la búsqueda secundaria (Desk reseach). Para las respuestas de Jaume, él contó con una carpeta llena de memes previamente seleccionados por nosotros (de 3 a 5 por cada pregunta) y que usó como su propia voz y reacción, tanto de lo preguntado como de las respuestas de Borja.


AUTOPSIA
BIBLIOGRAFÍA
es un aprendizaje continuo sobre uno mismo. Se trata de un proceso por el cual una persona se dispone a conocerse y conocer el mundo que le rodea; es un ser conscientes de lo que conforma nuestra forma de ser y un cuestionamiento en constante cambio sobre ello en todos los ámbitos de la vida (social - socio-cultural - funciones psicoemocionales y fisiologías hereditarias)
El desarrollo personal